Apreciados hermanos recuerdo cuando Elías pensó que había quedado solo pero el Señor Dios Todopoderoso le enseñó que siete mil no habían doblado sus rodillas delante de Baal, entonces tuvo consuelo de saber que eran muchos los que adoraban a Dios tal como le fue enseñado.

 

Sin pretender ser un imitador pero como creyente busqué y hallé por gracia de Dios compañeros que creen como Dios me enseñó; y hoy no estoy solo en el ministerio, tengo compañeros, amigos, a quienes puedo dar la diestra de compañerismo y con confianza el púlpito (las almas) porque sé que no les harán daño sino que estos preciosos varones construirán por la inspiración de Dios tabernáculos vivientes (creyentes) para la adoración en espíritu y verdad. Gracias a Dios por tal regalo desenvuelto. Un profeta dijo:

 

“Ni por un momento traigo un mensaje al pueblo para que ellos me sigan, o se unan a mi iglesia, o para iniciar algún compañerismo u organización. Yo nunca he hecho eso y no lo voy a hacer ahora, yo no tengo ningún interés en esas cosas, pero si tengo interés en las cosas y pueblo de Dios, y si yo puedo llevar a cabo solo una cosa estaré satisfecho. Esa cosa es ver establecida una verdadera relación espiritual entre Dios y el hombre, en la cual el hombre llega a ser una creación en Cristo, lleno con su Espíritu y que viva de acuerdo a Su Palabra. Yo invitaría, suplicaría y advertiría a todos a que escuchen Su Voz en este tiempo, y que rindan sus vidas completamente a El, así como confío en mi corazón que yo le he dado mi todo a El. Que Dios los bendiga y que Su venida  regocije su corazón.”       W.M.B. Sed 19.09.65